Últimamente he pensando mucho en sexo. O bueno, para ser más específica: en la sexualidad femenina; en la evolución de la práctica y los sentires alrededor de ella. Primero: sentida como una actividad insufrible, realizada sólo en el nombre de Dios para procrear y compromiso marital (¿debo decir que en ese momento era exclusivamente centrada en un placer masculino?). Después, el paso a la liberación sexual con la píldora primero y luego con otros métodos anticonceptivos para promover la autonomía sobre nuestras cuerpas; lo cual permitió pensarla en términos de placer, deseo y planificación familiar (en teoría, donde también se atraviesan los accesos a la información y la ESI, tema fundamental en la actualidad), y distanciarnos de la moralidad rancia, apestosa a patriarcado que constriñía las cuerpas.
Traté de encontrar un sentido perdiéndolos todos... Y parece que lo logré. El punk rock permanece.
miércoles, 9 de septiembre de 2020
Querido diario:
Todo esto lo pienso porque he leído (fuentes: "créeme, wey" como dice Lexa), pero para lo siguiente no tengo referencias académicas sino la única experiencia directa o indirecta, la que se escurre en conversaciones con amigas, conocidas o chicas con cuyos caminos me cruzo para darme cuenta de que el patriarcado se nos cuela en las cabezas: para algunas ya no hay un peso moral al ejercer una sexualidad libre... sino que viene después y eso tiene qué ver con la falta de cuidados de nosotras mismas, las prevenciones sobre temas de ETS o embarazos, y sufrir las angustias en esta misma cuerpa que tratamos de disfrutar a pesar de los precios -o castigos- hormonales que los métodos puedan infligirnos; es como si nos hubiéramos liberado de la idea del sexo con fines reproductivos pero el sistema nos trata de constriñir a ello. Las opciones son: 1) no tengas sexo si no quieres maternar, 2) ten sexo y sufre (porque se tiene que sufrir [qué genial que algunas sean la excepción]) las consecuencias de no procrear a través de los métodos anticonceptivos, 3) ten sexo y reprodúcete (que está bien lo de ser mamá pero no a huevo, pues).
¿Debemos sentirnos solas ante estas decisiones y las consecuencias de las prácticas en sexo heterosexual?, ¿la responsabilidad del cuidado sexual por ambas partes lo aliviaría? Hablo con prescindencia de vínculos afectivos, con que sean sexuales es suficiente.
Gracias por leer y mejor si me dices qué piensas para no sentirme tan aislada en mi cabeza.
[Esto es un post de FB, donde trataba de escribir sobre el mismo tema de la última entrada]
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